21 de agosto de 2021

Emilia Pardo Bazán: el reto de la modernidad

Hasta el próximo 26 de septiembre está teniendo lugar en la Biblioteca Nacional de España, en Madrid, la interesantísima exposición dedicada a la insigne escritora, doña Emilia Pardo Bazán (1851-1921), con ocasión de la celebración durante este año 2021 del primer centenario de su fallecimiento. La muestra es un recorrido a través de las diferentes facetas de su vida y de su obra, desarrolladas durante la España de la Restauración (1875-1923).

La condesa de Pardo Bazán fue una de las principales escritoras europeas de su generación cuyas obras han sido seguidas por un gran número de lectores y han sido traducidas a más de diez idiomas. Su amplia trayectoria intelectual abarcó múltiples áreas de interés y, entre ellas, fue novelista, periodista, crítica, historiadora, empresaria, dramaturga y aficionada a los debates. En el plano personal fue una convencida feminista, católica, liberal y profundamente interesada por la política y amante de la vida social.

 
La exposición nos muestra todas estas facetas en diferentes secciones, pero entre ellas me han interesado especialmente los apartados que se refieren a su vida familiar y social. La primera de estas secciones  es la titulada: "La construcción de Emilia Pardo Bazán (1851-c. 1880)", en la que se expone la ascendencia de la escritora: el matrimonio formado por el hidalgo don José Pardo Bazán y doña Amalia de la Rúa Figueroa, del que fue su única hija. Se recuerda su educación esmerada en un ambiente liberal y el matrimonio que se celebró años más tarde entre doña Emilia con el también hidalgo, don José Quiroga y Pérez Deza, pareja que, tras la revolución de 1868, mostró su tendencia carlista. En esta sección se desarrollan aspectos de su juventud, sus comienzos como escritora, su maternidad y el inicio de su relación con algunos intelectuales españoles como Marcelino Menéndez Pelayo.

Otra sección que trata aspectos familiares es la titulada: "La heredera del padre. Dueña de sí", en la que pueden conocerse detalles sobre cómo influyó en la escritora la muerte de su padre ocurrida en 1890, fallecimiento que provocó en ella una enorme tristeza. En carta que doña Emilia Pardo Bazán dirigió a Benito Pérez Galdós en 1890, definía a su padre como "el mejor de los amigos, el más leal de los consejeros y el apoyo de todos los momentos". Con su herencia paterna fundó la editorial "La Biblioteca de la Mujer", la revista "Nuevo Teatro Crítico" y comenzó la construcción de las Torres de Meirás, edificio conocido actualmente como el "Pazo de Meirás".


Para esta época ya se había separado de su marido, pero recibió presiones de su confesor para que regresara con él, aunque Emilia Pardo Bazán decidió continuar con su vida independiente y se instaló en Madrid, junto con su madre e hijos. En su casa de la calle San Bernardo nº 35, se celebraron conocidas tertulias que reunieron a importantes personalidades de la vida cultural, política y social del momento. Entre ellos, el marqués de Villasinda, la condesa de Requena, la marquesa de la Laguna, el barón del Castillo de Chirel, la condesa de Esteban Collantes, la marquesa de Aguiar, el conde de Tejada de Valdosera, el conde y la condesa de Urbasa, el marqués del Riscal y la marquesa de Tenorio han quedado inmortalizados en preciosas fotografías que fueron realizadas en la casa de la escritora, a quien se ha calificado de elitista.

Por último, siguiendo las secciones de especial interés para su historia familiar, se presenta un apartado que ha sido titulado: "Meirás" y trata de las torres que construyó en este lugar, "el sueño dorado" de Emilia Pardo Bazán, donde decía que se sentía más creativa, libre y sosegada. Las torres fueron diseñadas por la escritora y por su madre en estilo neorromántico y en este lugar quiso ser enterrada, pero su deseo fue incumplido por sus herederos, quienes en 1938 vendieron el edificio y sus tierras al ayuntamiento de La Coruña. No me detendré en lo que sucedió desde entonces con el Pazo de Meirás y hasta su conversión en patrimonio público, ya que es bien conocido por ser noticia frecuente en los medios de comunicación. Tampoco en la exposición se entra en detalles sobre ello, pero se expresa la opinión de que restituir en Meirás la memoria de Emilia Pardo Bazán puede ser la mejor manera de recuperar el espíritu con que se construyeron las torres.

Más información sobre la exposición en este enlace.